Diana Rico: “Por supuesto que el año que viene sigo”

A sus 36 años, Diana Rico es una reconocida árbitra tanto en España como en Alemania. Aunque debutante en nuestra Superliga, lleva más de tres años dirigiendo partidos en la competición alemana. Su calidad y su experiencia en tierras germanas le han permitido crecer mucho en muy poco tiempo, y aunque es una situación excepcional, también le permite compaginar ambas ligas.

Con la final de la Copa de SM la Reina aún en la retina, Diana Rico volvió de su fin de semana copero con más experiencia y habiendo disfrutado de un gran partido con victoria del Minis de Arluy Voleibol Logroño ante el Dimurol Libby´s La Laguna (Cv Haris) por 3-0.

A pesar de que no había jugado antes, Diana Rico dio sus primeros pasos en el mundo del voleibol como árbitra hace 13 años, cuando aún estaba en la universidad. Pero su esfuerzo, sus deseos de aprender y su pasión por el deporte le llevaron a jugar la tercera división alemana y la primera división nacional en España.

La pasión voleibolera que demuestra la ‘getafita’ no solo se nota sobre la silla arbitral. Rico es central en el equipo femenino Federado del Cv Getafe y una de nuestras referencias en esa posición. Pero, ¿cómo se llega al máximo nivel arbitral en España y Alemania? Rico confiesa que no es fácil pero que se puede conseguir “trabajando duro”.

Explica que como árbitro siempre estás en el ojo del huracán y que un mal partido te puede llevar a perder la categoría. Por eso, considera que para crecer hay que “escuchar, aprender y nunca parar de aprender”. Pero también se necesita “suerte”. No solo hace falta esfuerzo, también es importante “que vean una evolución, porque la máxima competición exige un nivel arbitral muy muy alto”.

Así pues, Rico conoce sus limitaciones. Sabe que la edad es un factor muy importante tanto como jugadora como en el mundo arbitral. Por eso, quizás, le hubiese gustado conocer este deporte mucho antes en su vida. Eso le hubiese permitido llegar con soltura y conocimientos para arbitrar partidos internacionales. “Arbitrar requiere mucho sacrificio y cambiar de país, en dos ocasiones, ha pospuesto mi carrera como árbitra”, pero “este año ha sido excelente”.

Sin embargo, como en otros deportes, la responsabilidad del arbitraje exige tensión y saber soportar la presión; por eso la ‘getafita’ cree que, a pesar de divertirse igual en su faceta como jugadora y como árbitra, como central se lo pasa mejor porque “un error del árbitro se nota más que los errores de los jugadores”.

Rico considera que el nivel de arbitraje español es muy alto, lo que permite a muchos compañeros arbitrar grandes competiciones como las “Olimpiadas, Champions League, Finals o Superfinals”. Y dice que le encantaría seguir en Cv Getafe porque le encanta el grupo, le encanta el entrenador y la facilidad para compaginar su particular “caos”. “Por supuesto que el año que viene sigo”.